El feminismo, motor del repoblamiento del mundo rural
Las mujeres representamos más del 40 por ciento de la fuerza laboral agrícola en los países desarrollados. Según datos de la ONU, esta cifra alcanza el 50 por ciento en países de África y Asía.
Cuando hablamos de la propiedad de la tierra, debemos ser conscientes que las mujeres estamos en una clara desventaja. En muchos países no existen normativas que nos garanticen derechos de propiedad sobre la tierra, pero en muchos de estos casos, las principales productoras de los alimentos somos las mujeres.
Es un reto vivir en medio rural en nuestro país. Hablamos de protección y sostenibilidad del medio ambiente, hablamos sostenibilidad poblacional que hace posible el mantenimiento de nuestros pueblos, retos donde las mujeres tenemos una gran importancia.
Por todo ello, desde el Espacio Feminista de USTEA exigimos a los poderes públicos, a los grupos políticos, que se ponga fin a la desigualdad que reina en el mundo rural. Es imprescindible la elaboración de una estrategia que luche contra la despoblación. Esta debe ser diseñada con una acentuada perspectiva feminista que propicie una igualdad real y efectiva en la que ahora conocemos como la `España vaciada´.
Aunque, de sobra es conocido, que la España urbana mantiene actitudes machistas, no podemos descartar que en mundo rural, azotado por el patriarcado, encontremos la oportunidad de consolidar una sociedad tan singular como igualitaria. Una sociedad cimentada en una escuela pública rural de la que emane la enseñanza coeducativa.
Por lo tanto, estamos ante un ejemplo de que la despoblación en el medio rural no solo debe relacionarse como una amenaza sino como la oportunidad de generar un nuevo modelo de sociedad.
La educación o la cultura, no deben ser los únicos elementos para impulsar las zonas rurales de nuestro país. Para ello, es necesario que los gobiernos (locales, provinciales, autonómicos, estatales e, incluso, europeos) apuesten por una política de cohesión territorial a través de la mejora de la vías de comunicación. Las autovías, el tren de alta velocidad o la cercanía a un aeropuerto, deben ser piezas fundamentales en la recuperación del territorio rural.
Además, en pleno siglo XXI es fundamental que se elimine toda zona de sombra en las coberturas móvil 5G o fibra de alta velocidad. Tanto la vía física, la carretera, como la vía digital son aliadas de una recuperación del mundo rural, como de una reivindicación del movimiento feminista en mundo rural.
Nunca habrá una repoblación del mundo rural, sea digital o no, sin una revolución.
Nunca habrá una revolución sin el movimiento feminista.
Espacio Feminista de USTEA
15 de octubre de 2023